Publicado en: Revista Instituto Colombiano de Derecho Tributario. No. 81
Mientras el comercio exterior colombiano celebra la esperada expedición ‘del 1165’, kilómetros afuera se sigue librando una cruenta guerra comercial entre EE.UU y China, que también nos afecta. En desarrollo de esta guerra, a mediados de agosto de este año (2018) el CEO de Apple le presentó al Presidente Trump lo que este consideró un ‘argumento convincente’. Al parecer, Tim Cook le hizo entender que Samsung (coreana) le ganaría más ventaja a Apple (estadounidense) al no pagar los mismos aranceles que pagan los productos de Apple ensamblados en China e importados desde ahí a EE.UU. Pero parece que se requieren más cenas y lobbying con más empresarios que, como Apple, le expliquen al presidente Trump la gravedad de la situación. ¿Esto qué le importa a Colombia? Es decir, ¿le debe importar? La pregunta parece necia porque la respuesta es obvia.